Ante el riesgo de un albazo legislativo por parte del PRIAN y sus aliados en la Cámara de Diputados, legisladores federales y locales del Partido de la Revolución Democrática (PRD) demandaron regresar a comisiones el dictamen de la Ley General de Aguas para eliminar el espíritu privatizador que atenta contra el derecho humano de acceso al vital líquido.
En conferencia de prensa, en el marco del Día Mundial del Agua, los diputados federales Aleida Alavez Ruiz y Alejandro Sánchez Camacho, así como los locales Alejandro Ojeda y Gabriel Godínez, denunciaron que hasta el momento la Junta de Coordinación Política no ha devuelto a las Comisiones de Agua y Saneamiento y la de Recursos Hidráulicos el dictamen inconstitucional que pone el riesgo el derecho humano al agua de todos los mexicanos.
Los legisladores hicieron un llamado a los grupos parlamentarios del PRI, PAN, PVEM y Panal a tener una voluntad real para un diálogo nacional que salvaguarde la rectoría del Estado en el manejo del agua y su compromiso de que el vital líquido llegue a todos los mexicanos, por lo que convocaron a una amplia consulta nacional que incluya las propuestas de todos los sectores de la sociedad civil y usuarios sociales del agua.
Calificaron como medida electorera el haber detenido la aprobación de este dictamen lesivo a la vida digna de los mexicanos, porque les quitaría millones de votos. Por ello, advirtieron del riesgo latente de que tras el proceso electoral intenten aprobarlo en un periodo extraordinario y por eso no lo han regresado a comisiones.
La legislación que pretenden impulsar los partidos de derecha, dijeron, también pone en riesgo la soberanía alimentaria porque ceden al capital privado el manejo del agua para beneficio de la industria y la agricultura de exportación. Además, puede provocar estallidos sociales como ha sucedido en otros países, donde la lucha ya no es política o económica, sino por el vital líquido.
La diputada Aleida Alavez Ruiz señaló que el PRI está mostrando su rostro más autoritario en este asunto, como lo demostró el coordinador parlamentario de este instituto político en la Cámara de Diputados, Manlio Fabio Beltrones, quien de manera grosera descalificó a legisladores de otras fuerzas políticas, académicos de la UNAM e IPN, científicos, especialistas de la ONU y de la sociedad civil que advertimos del intento privatizador de la ley peñista al que sólo le faltó reglamentar el agua de lluvia.
Aclaró que no están en contra del capital privado, sino de las concesiones para el manejo integral del agua. “Entendemos que los concesionarios deben recuperar su inversión, pero no que se eleven las tarifas y se ponga en riesgo el acceso al agua por habitante, por lo que siempre defenderemos este derecho humano.
En tanto, el legislador federal Alejandro Sánchez Camacho ratificó el rechazo del PRD al proyecto de ley de agua privatizador, por lo que convocó a un diálogo nacional que incluya todas las propuestas, ya que se trata de un asunto de soberanía nacional.
“Por eso desde ahora le decimos a Enrique Peña Nieto, al PRI y al PAN, que en el PRD no bajaremos la guardia, nos mantendremos atentos, pero además continuaremos llevando a cabo acciones pacíficas en defensa del agua”. Advirtió de la amenaza de que en la próxima legislatura el grupo gobernante se constituya nuevamente en mayoría, lo que significa la antesala de la privatización del agua.
Los diputados locales Alejandro Ojeda y Gabriel Godínez Jiménez, al solidarizarse con sus pares de la Cámara de Diputados, expresaron su total rechazo a cualquier intento privatizador del agua, por lo que anunciaron un foro que se realizará en la ALDF en el que participarán expertos y académicos, así como el director del Sistema de Agua de la Ciudad de México, Ramón Aguirre.
En este marco, hablaron sobre la situación de estrés hídirca que enfrenta el Valle de México, donde sus más de 20 millones de habitantes padecen de un bajo suministro de agua, con un promedio de 150 metros cúbicos al año por habitante, aunque precisaron que lo más grave es la distribución inequitativa, como el caso de Iztapalapa que padece de una escasez crónica.
Destacaron que se debe poner especial atención al estrés hídrico que padecen más de 79 millones de mexicanos al ubicarse en dos regiones que registran baja y muy baja disponibilidad de agua, en contrapartida con aquella que ostentan alta disponibilidad para una población de 7 millones y medio de personas.